Nuestra Señora de Guadalupe
Con mucha alegría seguimos celebrando a la Virgen María, Madre de Nuestro Señor Jesucristo y Madre nuestra, en este hermoso mes de diciembre, que en nuestra parroquia San Alberto Magno lo hacemos con toda la alegría que nos es posible, y que se traduce en las solemnidades y festividades en honor de Nuestra Señora, dentro del tiempo de Adviento, previo a la celebración de la Navidad.
Acabamos de celebrar hace unos días la hermosa misa Rorate Caeli, esperando la Luz del amanecer, que es la Luz de Cristo. Acabamos de recordar la definición del dogma de la Inmaculada Concepción de la Santísima Virgen María, el 8 de diciembre pasado, y ya estamos preparando la festividad de Nuestra Señora de Guadalupe, patrona de América.
Recordaremos la aparición de La Morenita, en el año 1531 (4 décadas después del inicio de la evangelización de América) al hoy San Juan Diego, indígena chichimeca, en el actual Estado de México, en las faldas del cerro del Tepeyac. Recordaremos que La Virgen María, mediante su presencia en estas tierras, confirma que también es Madre de todos sus hijos en América, y nos deja conocer su alegría por la evangelización en el nuevo mundo.
En nuestra parroquia celebraremos desde la víspera. El sábado 12 de diciembre tendremos el gusto de celebrar la Misa de 19h00 con la presencia de Mons. Giovanni Piccioli, Obispo Auxiliar de nuestra Arquidiócesis. Luego de la misa, saldremos en una pequeña procesión con la nueva imagen de Nuestra Señora, a la cual se le está preparando un oratorio en las faldas del cerro junto a la iglesia. Desde ese lugar de honor, La Virgen María de Guadalupe bendecirá a todos los feligreses de San Alberto Magno y a todas las personas que habitan en nuestras ciudadelas; también tendremos la oportunidad, sea que vayamos a pie, o en nuestro automóvil o en transporte público, de saludar a Nuestra Señora, y pedirle su bendición cada vez que pasemos por la iglesia.
Seguimos de este modo preparando durante este tiempo de Adviento, tiempo de conversión de nuestro corazón, para orientar todos los aspectos de nuestra vida: nuestra vida matrimonial y familiar; nuestro trabajo en la oficina, la fábrica, en la casa; nuestros estudios de colegio o de universidad; nuestra vida en sociedad, nuestras opiniones y decisiones en el ámbito de las leyes y la política, etc., orientar todos estos aspectos hacia el cumplimiento, sin ningún tipo de restricción, de la Ley de Dios tanto en lo privado como en lo público.
Celebremos pues, a Nuestra Señora de Guadalupe, este sábado 11 de diciembre, víspera de su festividad el domingo.
